WASHINGTON (AP) - La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el miércoles una iniciativa con la que busca impulsar la economía de Haití, el país más pobre de América, cuya capital quedó derruida por un terremoto en enero.
La medida, aprobada en una votación oral, amplía el número de textiles y prendas de vestir que Haití puede exportar a Estados Unidos, libres de aranceles.
También aumenta significativamente los niveles bajo los cuales ciertos tejidos pueden quedar exentos de impuestos y amplía hasta 2020 un programa de comercio que había contribuido al crecimiento económico de Haití hasta antes del terremoto del 12 de enero, que mató a unas 230.000 personas.
"Cuando llegó el terremoto, quedó claro que se necesitaba hacer algo para ayudar a Haití para que recuperara algo de lo que había ganado con tanto sacrificio. Esta legislación lo cumple", dijo el principal promotor de la iniciativa, el representante demócrata Charles Rangel.
Los textiles y la ropa son los productos de exportación más importantes de Haití hacia Estados Unidos. Las exportaciones de ropa haitiana alcanzaron 513 millones de dólares el año pasado.
Los legisladores subrayaron que conformaron la iniciativa de manera que cuente con el apoyo de la industria textil estadounidense, que ha sido muy afectada por la competencia extranjera.
La Coalición Estadounidense de Comercio Manufacturero, que representa a la industria textil, dijo que apoya la legislación pues además de dar una vía para la recuperación económica en Haití "toma en cuenta varios asuntos delicados desde el punto de vista de las empresas textiles de Estados Unidos".
La medida ayudará a reconstruir Haití con un "nivel de certeza que tanto ha hecho falta", dijo Rick Helfenbein vicepresidente de la iniciativa de recuperación para Haití creada por la asociación de productores de vestido y calzado American Apparel & Footwear Association.
Se espera que sea avalada rápidamente en el Senado, donde tiene el apoyo de los presidentes demócrata y republicano de la Comisión de Finanzas.
Los ex presidentes Bill Clinton y George W. Bush, encargados de recaudar fondos para el país caribeño, reconocieron la iniciativa aprobada por los representantes.
"Este importante paso responde a la necesidad del pueblo haitiano de obtener más herramientas para su recuperación ante la pobreza, al tiempo que beneficia a los consumidores estadounidenses", dijeron en un comunicado conjunto.
El Congreso ya ha aprobado una legislación que busca facilitar las contribuciones de ayuda para Haití y que llama a los grupos financieros internacionales para que perdonen la deuda haitiana.
En febrero, el representante de comercio Ron Kirk anunció un programa bajo el cual la industria del vestido estadounidense está conminada a obtener 1% de sus importaciones de Haití.
A pesar de todos estos avances, hay mucho por hacer en el propio Haití. Algunos economistas haitianos han advertido de la dependencia casi exclusiva de la industria textil para la recuperación económica del país y argumentan que el descontento por los sueldos excesivamente bajos podrían llevar a revueltas sociales. Los trabajadores ganan unos tres dólares al día, lo que resulta insuficiente para mantener a sus familias.
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