Ni Marc Jacobs, ni Stefano Pilati, ni tampoco Ricardo Tisci. Más de un año después de haberse quedado sin diseñador, Dior ha elegido por fin al sucesor del malogrado John Galliano. El pasado 9 de abril, la casa francesa enviaba un comunicado a los medios de todo el mundo en el que desvelaba el nombre de su nuevo director artístico, Raf Simons, un joven belga que promete iniciar una nueva era en la Maison de la avenida Montaigne.
A sus 44 años, este creador ha logrado sobresalir por encima de grandes nombres del fashion business gracias a sus delicadas líneas, su moda minimalista y sus aires clásicos. Contrariamente a su predecesor, más centrado en las excentricidades, el rococó y los dorados, el nuevo director artístico aportará su vanguardista feminidad a una firma en busca de nuevas señas de identidad.
"Estoy feliz de unirme a esta gran casa. El Señor Christian Dior siempre ha sido para mí uno de los creadores más grandes. La casa Dior es símbolo de elegancia absoluta. Su saber hacer único me inspira un profundo respeto. Mido el honor y la responsabilidad que me han sido dados hoy al dirigir la creación de la marca francesa más célebre del mundo”, explicaba en el comunicado el propio creador.
A pesar de ser un hombre discreto y reservado, contrariamente a John Galliano, gran amante de los escándalos, el estilo de Simons ha cautivado a los directivos de Dior, que lo han elegido como la persona idónea para encargarse de la ropa (Alta Costura y Prèt-à-Porter) y accesorios de mujer.
Raf Simons nació en 1968 en Neerperlt, cerca de la frontera con los Países Bajos. Estudió diseño industrial y empezó a trabajar como creador de mobiliario para galerías de arte y particulares. Después de unas prácticas con el estilista Walter Van Beirendonck decidió cambiar su trayectoria y convertirse en diseñador de moda, algo que se animó a hacer gracias al apoyo del por aquel entonces responsable de moda de la Academia real de Amberes, una de las mejores escuelas de arte del mundo.
El joven creador fundó en 1995 la marca Raf Simons y presentó en Milán sus primeras colecciones masculinas, dejando emanar unas siluetas sobrias con materiales clásicos. En 1999-2000 creó su primera colección femenina junto a su compatriota Véronique Branquiho. Sin embargo, ese mismo año, desencantado con el mundo de la moda, decidió tomarse un año sabático.
A finales de 2000 se convirtió en profesor en la Universidad de artes plásticas de Viena, puesto que ocupó durante cinco años. Un año más tarde, en 2001 retomó el diseño pero en un marco más pequeño e íntimo. Poco a poco, sus desfiles en París fueron cada vez más seguidos y admirados gracias a sus volúmenes, texturas e innovadores materiales, que anunciaban la moda del futuro.
No fue hasta 2004 cuando Simons decidió saltar al mundo de la moda femenina, un cambio que le valió su fichaje como director artístico en la casa alemana Jil Sander; un puesto en el que desarrollaría su estilo simple y limpio. Paralelamente a este nuevo trabajo, el creador belga siguió con su propia marca, logrando abrir en 2008 dos tiendas en Japón, e introduciendo accesorios como bolsos, marroquinería, zapatos y gafas en sus colecciones.
Parecía que Simons había encontrado su sitio en la firma alemana, pero hace tan solo unos meses, en febrero, el creador anunció su partida de Jil Sander, haciendo sospechar a más de uno sobre su nuevo destino, algo que finalmente se ha confirmado esta semana.
El potencial de los creadores belgas
La moda belga está de enhorabuena. Además de pisar fuerte en todas las pasarelas del mundo gracias a firmas como Martin Margiela o Dries Van Noten, a partir de ahora los belgas puedes presumir de controlar los diseños de la casa francesa Dior. Y es que, además del nombramiento de Simons, desde 2008 Kriss Van Assche es el director creativo de Dior Homme.
Tras este sorprendente anuncio, ahora solo falta esperar hasta julio para conocer la primera colección Haute Couture de Simons y poder ver por fin la nueva línea de una firma que seguro recupera su tan añorado toque chic, perdido con los excesos del gibraltareño.
Raf Simons (1968) es un diseñador de moda belga. Estudió diseño industrial, pero al cabo de unos años de estudio independiente, se convirtió en diseñador de ropa masculina en 1995. Inicialmente, trabajó con Walter Van Beirendonck en París, donde fue expuesto a la labor de Martin Margiela y Jean-Paul Gaultier.
Colecciones
Sus colecciones (sólo para hombre) están fuertemente influenciadas por la cultura de la juventud. A menudo combina el corte clásico de la sastrería masculina con el estilo baggy (ancho) callejero, considerado unas de sus mayores influencias. Su estilo ha sido ampliamente reconocido por los críticos y la industria de la moda. Se le considera uno de los más importantes innovadores en la moda masculina contemporánea.
Raf Simons presenta sus colecciones dos veces al año en París, pero trabaja y vive en Amberes, Bélgica. En sus primeros años, su pasarela se mostraba siempre de modos poco convencionales: los modelos (a veces no profesionales) iban corriendo por la calle o caminando en un parque, en un puente, o en torno a un estudio de fotografía.
Sus dos colecciones Raf Simons y Raf by Raf Simons se venden en Barneys, Seven en Nueva York y en una variedad de lugares en todo el mundo. Sus colaboraciones más recientes han sido con Eastpak, Doctor Martens o la actual con Fred Perry. En abril de 2012 fue nombrado director creativo de la casa francesa Dior como remplazo de el inglés John Galliano.