Moda masculina de impacto en Paris

Las pasarelas de París brillaron
PARÍS.- La moda de alta costura debutó el pasado domingo por la noche en la ciudad de París, donde colecciones salpicadas de sangre, uniformes militares, pantalones cortos y prendas inspiradas en el boxeo y fútbol marcaron la pauta, convirtiéndose en la próxima tendencia varonil.

Impactante estilo

La colección del holandés Josephus Thimister se inspiró en un grupo terrorista alemán llamado Baader Mainof, donde mostró sangre y uniformes militares. Esta fue titulada: 1915: sangre y opulencia y consistió en 45 creaciones.

Aquí se incluyó un capítulo militar, donde el creador tiñó de color rojo sangre vestidos blancos inmaculados y uniformes militares, se dice que esto formó parte de un homenaje hecho a los millones de soldados rusos caídos en la primera guerra mundial.

El diseñador explicó que el año de 1915 fue marcado por el conflicto y genocidio en los Balcanes y que además no es tan distinto del periodo actual, ya que éste se caracteriza por la incertidumbre, la sangre derramada, la catástrofe económica y la desolación.

Por otro lado, el catalán Josep Font atravesó por un difícil contexto económico que lo obligó a abandonar la alta costura y concentrarse sólo en el prêt-a-porter.

Pantalones cortos


Los pantalones cortos fueron una de las propuestas para el sector masculino que más llamó la atención. Ceñidos, drapeados, bombachos, cortos sobre leggings como los que usan las mujeres, lucidos con suéteres y aplicaciones de cuero o bajo abrigos largos con una mezcla de elegancia e informalidad, fueron las prendas que desfilaron por estas pasarelas.

Sin embargo, la pieza clave fueron los pantalones cortos. Los japoneses Issey Miyake y Kenzo, cuyo director artístico es ahora el italiano Antonio Marras. Por otra parte, Dior y otras firmas vistieron a todos sus modelos con pantalones cortos que iban acompañados de lujosos jerséis o corbatas sedosas, con hilos de plata.

La paleta de colores para el próximo otoño-invierno 2010-2011 integró el negro, distintos tonos de verdes, dorados, rojos, anaranjados y un poco de café y caramelo. Pero en otras tantas colecciones, el color que predominó fue el blanco, tal fue el caso del holandés Francisco Van Bethum que se inspiró en la Rusia Imperial, diseñando pantalones bombachos y chaquetas cubiertas de lentejuelas doradas.

Otros citaron inspiraciones más literarias, como Vuitton, que dijo haberse inspirado en el escritor Franz Kafka para una colección oscura, donde las chaquetas en tweed contrastaban con camisas blancas, flotantes.
La casa Cerruti retomó el "espíritu del ejército moderno", con pantalones ceñidos, recogidos en el tobillo sobre botines y chaquetas tipo militar en negro y cobre.

En varias pasarelas el brillo fue el protagonista principal, ya que abundaron piezas como collares y blusones bordados en hilo dorado, que podrían ser unisex, hasta jersey adornados con piedras brillantes.

Pero no sólo se resumió a eso, ya que también las camisas y pantalones estampados, bufandas largas, chaquetas deshilachadas de cachemira labrada bordada con aplicaciones de cuero, pantalones estilo quimono y jerseyde cuello alto lograron cautivar al público.

Espíritu de combate

Además, la esencia de los deportes también estuvo presente. Muchos diseñadores optaron por proponer prendas basadas en el boxeo y fútbol. Tal fue el caso del modisto francés Jean Paul Gaultier y del brasileño Gustavo Lins.

Gaultier presentó a todos sus modelos con albornoz afelpado y maquillados como si hubieran recibido una golpiza en una pelea de boxeo e hizo subir a sus modelos en un ring instalado en el centro de la sala de recepción de la casa Gaultier.

Se dice que el modista francés quiso proyectar "combatividad", en medio del difícil ambiente provocado por la crisis y mostrar con ello una manera distinta de vestir de una forma más desenvuelta y divertida.

Los colores sombríos, las zapatillas de boxeador, pantalones en jersey y bermudas fueron sólo algunas de las sorpresas que mostró, incluso propuso una de sus famosas faldas bajo largos abrigos de lana.

Por otro lado, Lins, quien presentará su colección de moda masculina en su desfile de alta costura el próximo martes, comentó que su inspiración la encontró en el fútbol. Esta se basa especial en el negro y blanco de las camisetas de su equipo Atletico Mineiro, de Minais Gerais (sudeste).

Toques femeninos

Pero el lado femenino también predominó en las prendas para hombres, la casa Ungaro, Franck Boclet, evocó un ambiente más suave que ofreció tejidos lujosos que se deslizan como jerseys o cachemiras. Esta casa de alta costura fundada en 1965 y reconocida por su sensualidad para manejar los drapeados en la ropa de mujer, es la primera vez que utiliza esta técnica para la moda masculina.

Serán dos elementos novedosos y claves los que caractericen a la colección: el drapeado y el uso de un alambre. La firma decidió colocar alambre a la ropa, para poder modificarla a su gusto y creando con ello arrugas en una chaqueta, o cambiar el cuello de un abrigo o de una camisa, pero sin dejar a un lado la comodidad.

Pero los detalles femeninos también sobresalieron en la casa Blaak con grandes collares sobre trajes negros, mientras que el holandés Dries Van Noten, creó una colección lúdica y joven con modelos que vestían en tweed.

Comentarios